A veces, la relación de dos personas comienza de una manera inesperada. En el caso de Bryan y Julio, fue un momento triste el que dio inicio a una amistad y apoyo incondicional que los hizo luego, unirse como pareja. El hermano de Bryan falleció y el estaba muy triste. Julio había perdido a su madre y sabia lo que es vivir el luto, por lo cual le dio su apoyo en esos momentos. De allí, nació una amistad y afecto que los llevó a enamorarse y ahora ser, legalmente casados. En la ceremonia encendimos velas para que la luz representara la presencia del hermano de Bryan y la mamá de Julio. Los novios tienen dos perritos que fueron parte del cortejo. La ceremonia la realizamos en el jardin del hogar de un familiar y con un intimo grupo de amigos; ya que la fiesta y celebración se realizó semanas después en un salón de Long Island.




Bendecidos con amor para que sea por siempre y para siempre