Ambos son salvadoreños y al hacerles broma de casarse un martes por el refrán que dice: “en martes ni te cases ni te embarques”, dicen que con amor no hay nada que no se pueda. Asi que el martes 27 de abril, en una linda decoración en tonos blancos, rosados y azules, al aire libre, fue un placer el unirlos en matrimonio. La novia entró de la mano de su pequeño hijo, el cual se quedó cerca de los novios y estuvo pendiente de lo que sucedía. Entre los tres hicieron la ceremonia de la arena para representar que a partir de ese dia, los recién casados, el hijo de la novia y un pequeño bebé de la pareja, forman un nuevo hogar.
Como siempre fue un placer, compartir evento con la excelente fotógrafa, Jeannette Chavez.
Bendecidos con amor para que sea por siempre y para siempre