Después de catorce años de conocerse, enamorarse y estar juntos, Glenys y Ulises, decidieron unirse en matrimonio. Fueron presentados por un amigo mutuo y desde entonces no se han separado. Sus miradas y gestos románticos entre ellos demuestran el amor qué sienten el uno por el otro.
En el jardin del hogar, acompañados de familiares y amigos, decidieron que este era el mejor momento de unir sus vidas y así se lo prometieron uno al otro, querer y cuidarse.
Bendecidos con amor para que sea por siempre y para siempre