En el jardin del hogar, bellamente decorado en tonos blancos y dorados; celebraron su union matrimonial. Linda Carol, de Peru, y Carlos Enrique, de Honduras; después de varios años de noviazgo. Cuando pregunté a los novios, sobre sus inicios; dijeron la palabra “casualidad”. La casualidad de estar ambos, en el momento indicado, en una situación que les hizo conocerse, cuando los dos necesitaban una mano amiga. Se apoyaron mutuamente y de la amistad, nació el amor. Sus miradas, sonrisas y gestos demuestran lo unido que están y el afecto a sus hijos. Un maravilloso grupo familiar, los acompañó en el evento.



Bendecidos con amor para que sea por siempre y para siempre