El pasado domingo 13 de enero, fue grato unir en matrimonio a dos jóvenes de República Dominicana, que por casualidades de la vida, se conocieron y enamoraron en Nueva York.
Un noviazgo de tres años que ahora culmina en matrimonio. Vinieron acompañados de una pareja de amigos que hicieron de padrinos y testigos. Cuatro personas super felices y donde predominaron las bromas y las risas de alegría.
Bendecidos con amor para que sea por siempre y para siempre